jueves

Ésta vez no te invitaré a entrar, ésta vez, seré más fuerte. Ésta vez no volverás a hacerme daño, ésta vez te quedas en la puerta. Porque no ha sido una vez, han sido muchas las que me has hecho dar marcha atrás, muchas las que has conseguido que el temor me paralizara. Simplemente por el miedo a equivocarnos, por el miedo a no ser suficiente. Hoy, querido Pasado, te quedas al margen. No puedo ser injusta, quizás si otras veces has aparecido ha sido por mi inconsciencia de tratar de buscar respuestas entre tus líneas, de enredarme entre tus consejos hilados con pinceladas de verdades que se disfrazan de universales. Sí, debo aprender de ti, de acuerdo, no lo niego. Pero, esta vez, lo haré sin caer en el error de creer que todas las situaciones son iguales. Las comparaciones son odiosas y, en casi todos los casos, innecesarias. Olvidando el pasado sólo consigues cometer los mismos errores en el futuro pero, ciñéndote a él, también. No dejar que los fantasmas de un pasado doloroso nublen, con sus consejos a media voz, las oportunidades que ofrece el presente, ésa es la cuestión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario